El 10 de junio de 1944, efectivos de la División SS "Das Reich" entraron en la población y asesinaron a 642 personas, entre ellas 190 hombres que fueron agrupados y fusliados en diferentes sitios de la población, y un grupo de 245 mujeres y 207 niños que fue reunido en la iglesia del pueblo para incendiarla después con todos en el interior.
Posteriormente el pueblo fue sometido a pillaje, incendiado y arrasado.
No está claro el motivo del ataque, es la muestra mas cruel de la represión nazi sobre la población civil en la europa occidental, al más puro estilo que se practicó ámpliamente y perfeccionó en la "guerra total" en el frente oriental.
Se especula con una operación de represión y la confusión con otro pueblo (Oradour sur Vayres), situado 25 km al sur donde presuntamente existía un depósito de armas y munición de la resistencia, o tal vez fuera una operación de castigo sobre la población civil (y la resistencia) por el desembarco aliado en el marco de la Operación Overlord, por parte de tropas que estaban siendo movilizadas hacia el norte para frenar la invasión.
De cualquier modo el pueblo carecía de relevancia estratégica y fue una demostración de poder criminal del cuerpo de élite del ejército en medio de su carrera a contrareloj de camino a las playas de Normandía.
El pueblo fue construido de nuevo en las afueras, el general De Gaulle ordenó conservar las ruinas como muestra de la acción nazi sobre la población civil y en 1980 se erigió un memorial.
Hoy hace exactamente 65 años de esa masacre.
Fotografía de Victor Velez.
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